Acabo de terminar de ver un programa en cuatro "casadas con Hollywood". Se trata de chicas españolas que habían dado el pelotazo del amor, enrrollándose o casándose con magnates.
Creo que hay mucha diferencia entre el comportamiento de las personas que nunca han tenido y de repente ahora tienen muchísimo con respecto a las personas, que por decirlo de alguna forma, nacieron en cuna de oro. Particularmente, mi experiencia personal ha sido que los ricos de cuna suelen ser más sencillos que los otros, quienes constantemente buscan "la exclusividad", eso que demuestre que quienes son o qué es lo que tienen.
Mujeres que llegaron a Los Ángeles trabajando de peluqueras, resulta que luego les parece imposible llevar ella solas a sus hijos a Disney, por ser una tarea demasiado complicada y estresante...las pobres. Yo no me puedo creer que el dinero te cambie de esa forma, puedo entender que te comiencen a gustar otras cosas y que cosas que aunque te podían parecer obscenas de repente al resultar posibles te permitas el lujo de tenerlas...al fin y al cabo, en muchas ocasiones, ni siquiera es un lujo. Recuerdo que una vez Jaime me dijo que a mi lo que me representaban 10 euros era lo que quizás para Victoria Beckham, podían representar 10.000€. Obviamente desde esta perspectiva, el mundo es completamente diferente.
Pero no sé, el programa me pareció que no aportaba nada, era tan superficial tan tonto... ¿qué objetivo tenía el programa? Y no es que piense que los típicos programas de neveras vacías, escombros, basura y drogas, me llamen la atención, pero es que la ostentación y el supuesto glamour tampoco me terminan de convencer, porque creo que ambas posibilidades de producción reflejan solo una parte, ya que digo yo, que los pobres también ríen y los ricos, como decía aquella novela, también lloran. Creo que nada es totalmente negro ni totalmente blanco, no digo que no haya unos grises más claros que otros, pero no me quieran vender que las vidas de estas chicas son perfectas. Aunque sea por el aburrimiento que alguna confiesa sentir en ocasiones, el cual es escondido mediante tratamientos y spas.
En fin...que la curiosidad es una cosa, pero la insistencia en este tipo de programas, yo no la entiendo....mucho menos en un país donde la reina de la televisión y por ende del pueblo (Sofía y Letizia se pueden ir a dormir) es una chica de San Blas.... por lo que cuatro no cuente conmigo para la segunda parte.