jueves, 22 de enero de 2015

The Good wife

Si, debo reconocerlo, me gusta mucho The Good wife.   Durante mucho tiempo me negué a verla por la simple razón de que a mi no me termina de convencer Julianna Margulies.  Sin embargo, la razón por la que ella no me gusta es que desde mi humilde punto de vista de espectadora, no trasmite, es fría, en la misma proporción que es bella, es decir, es super fría. Pero, resulta que lo interesante de Alicia es precisamente eso, su frialdad, esa coraza que va más allá de protegerla del resto y que en ocasiones, la protege incluso de su conciencia. 


Alicia: 

Alicia es inteligente y ambiciosa y por eso te crees la gran transformación que sufre. Una de las mejores escenas es la imagen doble en pantalla de Alicia, haciendo de mujer cornuda y en la otra, teniendo a Peter como simple acompañante, como hombre florero. Alicia se quiere comer el mundo y si para eso se tiene que merendar a unos cuantos, se los merienda. No es trepa, en el sentido peyorativo, pero si que es capaz de jugar sus cartas provocando que el otro caiga y no inmutarse ante la debacle del otro. 

Ella que ni se le conocía ni se le esperaba, ya está allí.  Llegó, sufrió, lloró y se los merendó. Ella que fue la Caitlin en su momento, ahora ni Dios se atreve a toserle y como buena protagonista, se folla todo lo que le apetece. 





Kalinda:

Porque la serie no existiría sin ella. Es cierto que no estará en la próxima temporada, pero hasta este momento, Kalinda es mucha Kalinda. Es un personaje inteligente y me encantan los personajes de mujeres inteligentes, poderosas, controladoras. Ella, Alicia, Diane, lo son. Sin embargo, no es de extrañar que Kalinda llegue a su fin, especialmente después de esta temporada. La mayoría de los personajes han evolucionado mucho, normal, después de todo son 6 años y sin embargo, Kalinda es siempre Kalinda, ni más ni menos.





Diane:

A la gente le suele fascinar como se viste Alicia. Y si, Alicia a día de hoy utiliza las chaquetas más espectaculares del mundo. Pero no siempre fue referencia en cuanto a estilo. El estilo de los pies a la cabeza en The Good wife lo lleva Diane. Nadie mejor que ella para demostrar lo que un accesorio bien usado puede hacer. 

Pero más allá de la moda, Diane es la fuerza, la feminidad hecha poder. Después de haber creado su propio bufete de abogados, resulta que al final se ve en medio de un juego de tronos para el que no estaba preparada o por lo menos eso nos parecía desde afuera.

 Diane es además,  lista, porque en ocasiones no solo basta con ser inteligente. Diane sabe más por vieja que por diabla y por diabla que por vieja. 

Diane tiene una de las mejores risas de la televisión y es uno de los personajes más especiales de la serie, en los que se encierran a partes iguales, el humor y el drama. 



Política:

Porque me estresa la gente que dice que no le gusta la política. Yo entiendo que no quieras ser político de profesión, pero no hablar de política es ser un irresponsable, sencillamente porque vivimos en un mundo politico y politizado. Ya no se trata de partidos políticos, porque eso es  politiquería, que normal que a casi nadie le guste.

The good wife te permite ver los entramados, los favores, la corrupción, la maquinaria que se mueve detrás de una cara en un cartel de campaña.  The good wife nos muestra como ser bueno y ser eficaz, no siempre van de la mano, y como no se puede desaprovechar oportunidades, quizás eticamente discutibles, pero politicamente correctas. Parece algo contradictorio pero no lo es.  

The Good wife nos muestra al hombre que es político visto desde dentro. No desde el cartel de campaña, sino desde el momento en que cierra la puerta de su casa y ya no tiene los ojos de los electores, sino los de su propia familia, que también escrutinan. 

Mujeres:

No soy una persona feminista. No voy del rollo de mujeres al poder porque somos mas chulas que un 8 y mejores que los hombres. Creo en la meritocracia por encima del género y creo que hemos vivido en un mundo extremadamente machista que para beneficio de todos, está cambiando. Esta serie es una serie de mujeres hecha unisex, y me encanta. 

Cuando las actrices se quejan de la carencia de papeles interesantes, a partir de los 40, viene The Good wife y nos enseña la maravilla de las cuarentonas, cincuentonas y sesentonas,  en acción.  Brillan por su experiencia,  por sus arrugas y por su gran calidad como actrices. 


Llevo años diciéndolo, la gente que se llena la boca, diciendo que no ve televisión, no sabe la cantidad de cosas maravillosas que se está perdiendo. La televisión esta de fiesta, la calidad del producto nunca había sido mejor y la diversidad, nunca mas rica. 

Decir que no ves televisión a día de hoy, es decir, simplemente, que eres un paleto. 

lunes, 19 de enero de 2015

trabajando y estudiando se llega a Roma!

2014 ha comenzado como muy deprisa, con muchas cosas... no sé si es el síndrome post vacacional, pero yo siento que no rindo como antes. Estamos ya a mediados de mes y no he comenzado ninguno de los reportes que se supone que para el 24 tienen que estar listos y finiquitados.

Recién comenzado el año, mis jefes me ofrecieron una promoción o ascenso, o por lo menos así me lo quisieron vender. Para mí no supuso la euforia que supuse un ascenso representaría. Era de esas promociones que solo implican un cambio de titulo, un minúsculo aumento de sueldo y además un montón de cosas que cuando las puse en la balanza, decidieron por mi. Creo que no estoy en un momento para cambios de ese estilo, sobre todo por los cambios que implicaba a nivel de logística. Pasé dos días de sufrimiento. Siempre es complicado decirle a alguien que no, cuando lo que ese alguien ha hecho es halagarte, y poner tu trabajo por las nubes...  

Hay cierto sentimiento de que rechazas, traicionas o por lo menos, así me sentía yo. No quería que quedarán dudas de lo agradecida que estaba por ofrecerme el puesto y de lo mucho que me gusta mi trabajo, así como tampoco quería dejar una puerta abierta a la negociación.  Por suerte, todo salió genial, mucho mejor de lo que yo pensaba y a pesar que me trituré la cabeza y lloré como una Magdalena  escribiendo la respuesta, al final,  resultó que comprendieron mis razones, las cuales no fueron para nada creativas, sino muy reales y además mi grupo y mi jefa directa, se pusieron super contentos al saber que me quedaba. Qué más se puede pedir?

Parte del ofrecimiento se hizo realidad, no supone un cambio de sueldo, pero sin embargo si que te me da más juego para cosas que me interesan a futuro. Triste pero cierto que con casi  37 años, siga teniendo que pensar en hacer curriculum.  Es lo que tiene comenzar a cotizar tarde...

De resto, quedan solo una clase en el Instituto Cervantes y aunque me ha gustado el curso, debo reconocer que estoy loca por terminar. La clase, los viernes de 6:00 a 9:00 destrozó mi pasión por los viernes y la alegría con que los solía relacionar. Solo una clase y dos practicas, con su programación, sus alumnos, su clase...en fin, todo Dios manda y colorín colorado, ese curso se ha acabado!

Luego, pues tengo muchas ganas de hacer otro curso, pero estoy esperando porque comienza en abril y al parecer, corre el rumor de que el colegio va a escoger a un profesor de cada colegio y va a ofrecer pagar el 50% del valor. Eso es un montón y a mi me vendría que ni pintado! Pero claro, lo escogen ellos, así que esto es como el Miss Venezuela, no solo hace falta, presentarse y querer, sino que lo más importante, es que te elijan. 

Y luego, como último curso está uno que se hace en el Trinity y es sobre pintura europea. La verdad es que me encantaría volver a esa área, aunque sea simplemente como estudiante. Hay tantas cosas para ver, para descubrir...

Soy estudiante por vocación, mucho mucho más que trabajadora. Trabajo porque no me queda otra y porque me gusta lo que hago, pero si pudiera dejar de trabajar para sacarme la carrera de psicología, sin ninguna duda, lo haría. No sé ni siquiera si ejercería, me imagino que si, intentando enfocar lo que hago ahora, con problemas relacionados con el comportamiento humano. 

En fin, para unos 2015 es el año de la dieta, de la semana al mes vegetariana, de la responsabilidad... pufff! ( qué aburridos), del dejar de fumar o de comer chocolates. Para mí, es el año de los estudios y la familia. Quiero seguir estudiando y quiero pasar más tiempo con mi familia. La de aquí, la de allá y la de acullá, en general, la de todas partes...



Ah! y quiero seguir mi racha de mínimo, dos libros al mes y 4 películas... aunque parezca mentira, lo segundo me resulta mucho más complicado.