domingo, 11 de octubre de 2009

El infierno está lleno de buenas intenciones y el cielo de buenas obras

Llevo dos días indignada. Me parece increíble y hasta ridículo que el Nobel de la Paz, se entregado a Obama. ¿Qué ha hecho este señor? Y hablo desde una perspectiva donde Obama es lo mejor que le ha podido pasar a Estados Unidos, después del desastroso legado de Bush.  Creo que Estados Unidos y el mundo han ganado una persona interesante, con ganas de trabajar y progresar en pos de una globalización más sana y más justa. Su postura ante la clausura de Guantamano, es sin duda, un gesto de humanidad y de responsabilidad política, pues los atropellos y abusos, ocurridos en ese limbo territorial, no podían seguir sucediendo.

Sin embargo, Obama, es para mi, un recién llegado y por lo tanto, sus hechos son prácticamente nulos. Es cierto, que trae consigo una maleta cargada de esperanza y buenas intenciones, pero de esas el infierno está llena... ya sé que puede sonar paradójico, pero a día de hoy quien ha hecho más por la paz mundial: Michael Jackson u Obama?  Sin duda el primero, ha sido el artista que mayor dinero donó en pos de una infancia digna, en países olvidados por todos, especialmente por las grandes potencias...

Y claro, algún chistoso hará un comentario burlón con respecto a la razón por la cual  "Michael amaba a los niños", no me importa, si el Nobel premia los hechos, creo que los suecos  pifiaron este año y han convertido el Nobel de la paz, en un instrumento político que sirve para hacerle la pelota a Obama.

¿Os imagináis que le hubiesen dado el Nobel de la paz a la madre Teresa de Calcuta, cuando se le ocurrió que cuidaría y velaría por los pobres de la India? o cuando Rigoberta Menchú decidió encausar su vida en pro de la defensa de los derechos humanos de los  indígenas? y si esa misión solo hubiese sido una ráfaga, un leve destello, una intención....

Como dije antes, de buenas intenciones está lleno el infierno, para algunos, de ellas está empedrado su camino... lo importante es que ojalá Obama no que se quede simplemente en ellas, y demuestre con obras, todo aquello que ha venido prometiendo....de lo contrario el Nobel, año tras año irá perdiendo la autoridad que lo caracterizó durante mucho tiempo.

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