domingo, 23 de septiembre de 2012

Sombras y figuras...

Pues si, hoy se me ha caído la cédula. Cuando te pones a recordar cosas de una época terriblemente lejana, significa que estás mayor. Hoy estuve viendo videos de Menudo, me reí pensando en lo mucho que me gustaban, en lo guapos y lo perfectos que los veía y lo mucho que me enfadaba si alguien osaba a decir algo negativo sobre ellos. 

Fui fanática del segundo momento de esplendor de Menudo, conformado por el famoso Ricky Martin, Sergio, Rubén, Robert y Angelo. Sin embargo, Menudo siempre ha estado presente en mi vida. Tengo muy mala memoria de cuando era muy pequeña, sin embargo, recuerdo perfectamente el abrir los ojos un 25 de diciembre y descubrir un montón de regalos a los pies de la cama, uno de ellos, el disco de Menudo ¨Una aventura llamada Menudo¨¨sin envolver  y este disco salió en 1981, así que desde los tres o cuatro años mi menuditis había comenzado. 

Así mismo, una de las pocas veces que las monjas llamaron a mi mamá cuando estaba en 5to de  primaria, fue precisamente cuando me ¨confiscaron¨un cuaderno que había hecho de Menudo con  fotos de revistas, letras escritas a puño y letra decoradas con corazones y los recortes de prensa, especialmente del periódico Últimas Noticias, un periódico vespertino que por alguna extraña razón sacaba un montón de reportajes con fotos a color! Lloré cuando me lo quitaron como una magdalena... no solo eso,  sino que me enfadé con el pobre de mi tío Edgar por considerarlo un mal tío. No solo se casó el día que Menudo se presentaba en la Gala de los Ronda, sino que además, siendo jefe de seguridad del aeropuerto en aquella época no usaba su ¨poder¨para pasarme a conocerlos. Yo se lo decía casi con lágrimas en los ojos y el se reía y yo me moría por dentro, cada vez que mi mamá me decía que mi tío Edgar antes muerto que utilizar su puesto para una chuminada como esta. Y claro, yo pensaba: Chuminada conocer al hombre de tu vida? Ese que sin lugar a dudas si te conociera se enamoraría perdidamente de tí? 

Menudo también representa una época maravillosa para mí de veranos y navidades en Puerto Rico... pocos conciertos recuerdo como el del 29 de diciembre del 91 o 92 en el Palacio de las Bellas Artes....

Y aunque suene raro, para mi Menuditis también está muy ligada a mi hermano mayor. El ha sido un hermano  que se ha comportado como mucho más que un hermano en muchas ocasiones. No solo me pagó mi carrera universitaria, sino que me regaló mi primer  y segundo coche, mis adorados Accent y Yaris. Hoy en día seguimos hablando, hablamos y nos echamos broma e intentamos estar pendientes el uno del otro. En medio hubo muchos años en los que no  nos hablamos y aunque yo intentó recuperar el tiempo perdido, yo sé que hay cosas que no volverán a ser iguales...es como si en esos años, en los que ambos crecimos, hubiésemos tenido que rellenar el espacio que habíamos dejado y luego años después pues como que nos cuesta volver a encontrarnos el hueco. 

 Mi hermano puede ser una ladilla crónica, se le pueden ir los tapones, puede gritar con un energúmeno cuando está enfadado, pero a pesar de todo eso, nunca me ha dejado tirada si en sus manos ha existido la posibilidad de ayudarme. Yo confío en él, confío para contarle lo que no le cuento a nadie, aunque quizás el no sepa que es así, pero por sobre todas las cosas, mi hermano fue la persona con la que viví mis primeras salidas de noche, mis risas por la Avenida Libertador al ver a las primeras prostitutas y travestis de mi vida, mis primeros engaños a mis padres con una linea interminable de pin y pones en la ventana, mis primeros Levis, mis primeros sobrinos, mi primera tarjeta de crédito y por sobre todas las cosas, mi primer concierto de Menudo en el Poliedro de Caracas, lo que es el infierno para cualquier madre responsable. Aunque se ha burlado de mí por diez mil cosas, en esa época cuando todos te hacen ver lo estúpida que eres por gritar y suspirar por alguien que ni siquiera sabe que existes, el no solo me traía revistas sino que además se plantó en casa con las entradas. 


Como veis hoy estoy nostálgica, nostálgica de tiempos pasados que se fueron y que han dado paso a otros muy buenos también. Sin embargo, para mí es inevitable escuchar You got potentital y no sonreír recordándolo en lo alto del Poliedro  haciendo el ¨bailecito¨de la canción conmigo. Obviamente también recuerdo lo mucho que lo odié cuando al día siguiente el fue al concierto de no  recuerdo quien en el Poliedro, alguien como Miguel Rios o algo así, y llegó contando que justo justo en la fila de atrás se encontraba Rubén, el gran amor de mi vida en ese tiempo, aunque eso es otro historia...

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