Estoy encantada, ha sido un viaje tan problematico que cuando por fin he llegado todo ha fluido perfectamente. En el aeropuerto me esperaban mi mama y Victoria, y al salir del aeropuerto casi me muero del calor. El aeropuerto Simon Bolivar se encuentra en la playa, por lo que el calor y la humedad son infernales, pero luego comienza la super subida en una Venezuela que he encontrado mas exhuberante que nunca. Estamos en temporada de lluvia, por lo que todo es verde, pero no verde como en Irlanda, pues he aprendido, que cada lugar tiene su verde y si en Irlanda es mas verde esmeralda, el verde de Venezuela es un verde mas oscuro, mas intenso...bajar a Caracas y ver el Avila es toda experiencia, que pienso que solo los venezolanos de la capital, pueden verdaderamente apreciar, cuando se han marchado durante un tiempo, porque la cotidianidad hace que lo maravilloso resulte "normal".
En alguna ocasion he comentado que para mi, no hay cielo mas bonito que el de Caracas. Para algunos, el cielo es igual en todas partes, pero si de verdad te pones a observarlo, notas que cada cielo es diferente. Me imagino que influira la luz, la vegetacion, el clima, etc...pero lo cierto es que el cielo de Caracas es maravilloso cuando esta azul e imponente cuando se avecina tormenta. Tormentas rapidas y fugaces de unos 10 o 15 minutos, que inundan absolutamente todo, cuyas gotas parecen casi piedras de lo fuerte que caen sobre los cristales de los coches. Pero eso es el padre nuestro de todos los dias, por lo que la lluvia no se convierte en un obstaculo para ningun plan, bueno, a menos que sea un plan playero, pero a pesar de eso, recuerdo que me encantaba bañarme en la playa o la piscina, mientras caia un aguacero.
Y que decir de como se me salen los ojos? Venezuela es un pais donde en cada esquina, hay cosas para comer. Y es que es terrible, en una esquina esta el chichero, que con su canela y leche condensada por encima, me pierde... luego, un poquito mas alla, se encuentran los golfeados y quesadillas, justo al lado esta el puesto de tartas caseras de chocolate, vainilla, coco, dulce de leche, manzana, un poquito mas alla, el puesto de los dulces venezolanos, donde el pan de horno, almidon, suspiros, bocadillos, etc, se convierten en la perdicion de toda buena venezolana que viva en el extranjero y que durante toda su vida haya sido una compradora asidua y compulsiva de un puesto de comida callejero. Ya lo decian mis compañeros de universidad, que el mejor perrito caliente, no es el que haces en tu casa con todas las condiciones de higiene optimas y las mejores empanadas, no son las que se frien en aceite nuevo...Hay algo mejor que los asquerositos de Las Mercedes o las hamburguesas de Calle El Hambre?, Alguien se imagina cambiando el regularmente el aceite en las freidoras de El Palito? O cambiando el aceite si se frie queso, cazon o pabellon? En eso radica la sustancia, el sabor insuperable de tan afamadas viandas.
Me encanta venir y estar de vacaciones, me encanta ver como todo el mundo sonrie cuando me ve, cuando paso por las tiendas de toda la vida y un señor que me conoce desde que naci, al verme me grita " hola come cebolla) sencillamente porque cuando era chiquitica me comia las cebollas crudas. He crecido, han pasado 30 años, y de esos 30 llevo casi 10 afuera, y sin embargo, en el momento en que llego, siempre me hacen sentir como que me fui ayer o quizas vuelvo de unas vacaciones largas, porque sino, no se explica la emocion. En fin, que estoy feliz, que me encanta estar aqui, que estoy durmiendo en la mejor cama del mundo, que me estoy tomando todos los batidos de frutas naturales habidos y por haber, que me parece mentira estar otra vez con Leia, y conocer al nuevo integrante de la familia, Shortie, con quien duermo todas las noches.
En fin, que un beso enorme a todos, en especial a mi pequeña, que la extraño un monton y por supuesto, a mis chicos favoritos: Jaime y Banjo.
1 comentario:
Me alegro mucho por ti.... te lo mereces! muchos besos a todos.
Publicar un comentario