Mujeres reales?

Nuevamente se enciende el revuelo en el mundo de la moda. Una revista decide poner en portada la foto de una modelo de tallas grandes junto a una modelo de talla regular, para demostrar que las segundas, se encuentran dentro de los índices establecidos de anorexia.

Y claro, con este tipo de portadas se encienden las alarmas y las indignaciones.  Particularmente creo que incluso intentando promover una imagen más sana, la idea de tallas grandes con esta modelo, nos muestra  que algo malo pasa con nuestra sociedad.  La modelo de ¨tallas grandes¨ se calza una talla 12 que es igual a una 40.  Es esto una talla grande? Sinceramente creo que no, pero lamentablemente en el mundo de la moda si lo es.  Esta chica que es sencillamente espectacular es catalogada como ¨gorda¨, lo que me hace pensar que lo que consideramos bello,  además de ser subjetivo, esta basado en ideales  que nos han impuesto a lo largo de muchos años y que son  muy difíciles de  destruir. 

Sin embargo, también existe la otra tendencia de exaltar la gordura o el sobrepeso y eso tampoco está bien. Mujeres reales no son solo las gordas, eso ademas de racismo es discriminación pura y dura.  Tan real puede ser la chica de la talla zero, que la de la talla 14... ya que la realidad no se sustenta en un número específico.  Conozco gente que coma lo que coma, jamás engorda. A muchas le dijeron que tuvieran cuidado porque en ocasiones el metabolismo cambia y pasa factura. A unas les pasó, a otras no.  Otras de tallas superiores, bajo control de  dieta y ejercicio se sintieron frustradas ya que  la perdida de peso fue realmente inapreciable en comparación al esfuerzo  invertido y las lágrimas vertidas.  Otras, han tenido que luchar con su delgadez natural, lo que incluso las ha condicionado a la hora de tener hijos... son estas últimas menos reales que todas las demás? quizás sean minoría, pero eso no las hace mujeres de mentira. 

Para mí, el sobrepeso siempre ha sido una cruz y creo que si cuando entrenaba  un promedio de 3 horas diarias, con un esfuerzo propio de la alta competencia, siempre estuve por encima del peso ideal, mis expectativas de ser una super modelo, están completamente evaporadas.  Esto tampoco quiere decir que me abandone a mi suerte y termine rodando por la facilidad y el ahorro de transporte, pero no se puede vivir sufriendo por este tema y convirtiendo cada compra en un suplicio. Soy como soy, y lo que he tenido que hacer es aprender qué hacer con todo esto. Por

Soy fanática del programa How to look good naked, quizás porque las transformaciones se hacen a partir de la confianza y demostrando como conociendo nuestro cuerpo, podemos lograr  el balance y la proporción adecuada para vernos bien. No todo nos sienta bien a todas, sencillamente porque tenemos  cuerpos diferentes y a pesar de la dieta e incluso de las operaciones, nuestra estructura ósea es como es y no va a cambiar nunca. De pequeña y adolescente mi hermano siempre decía que parecía un armario empotrado, por tener la espalda tan ancha. Para algunos es consecuencia directa de la natación, pero sea cual sea la causa, tuve  que aprender a vivir con ello y no ha sido precisamente fácil.   Teniendo la espalda tan ancha, sin cintura y sin caderas, sinceramente si que puedo parecer un armario sin forma alguna.  Ya no se trata simplemente de los kilos de más, sino que además, estos kilos se mezclan de forma desproporcionada... ya me gustaría a mí que los kilos se me fuesen al culo, las cartucheras  o a las piernas como a ella...  

Esta imagen muestra perfectamente lo que  quiero decir con proporción agradecida. Esta modelo de tallas grandes utiliza la  48, es decir,  dos tallas más que yo, y sin embargo, ella se ve de escándalo. La razón? Simplemente se encuentra en la proporción adecuada. Los kilos se distribuyen por su cuerpo, creando las tan anheladas curvas y parece que nada sobra o si lo hace, sobra en su justa medida y en todas partes por igual.  Y es que así, si que mola estar gorda, o por lo menos, la cruz no es la misma.

De cualquier forma, mi querido Gok me ha enseñado muchísimas cosas, siendo la más importante, que todas podemos vernos bien y sentirnos cómodas con lo que llevamos, si primero nos encontramos cómodas por dentro...además, con un ingeniero que me dice: armario empotrado de mi corazón! cualquier trauma desaparece con una gran sonrisa.